Sexo matinal XXX

Una señora tenía ganas orinar y, como no se aguantaba más, se pone
tras una esquina a hacerlo.

En eso, un hombre que pasa por allí, al ver a la mujer en sus quehaceres, para no interrumpirla espera a que ésta termine para pasar, cuando oye que se tira tremendo pedo y le reclama:
"¡Señora, pero que cochina es usted!"
"¿Y tu cuando meas, no te la sacudes?

Pues si, pero yo no me la soplo".

JEFE:
- ¿Quién te ha dicho que puedes pasarte dando vueltas sin trabajar todo el
día, sólo porque tuvimos un rollo???
SECRETARIA:
- Mi abogado...

Un amigo le dice al otro:
- ¿Tú que piensas de las mujeres cuando practican el sexo con nosotros?
¿lo hacen por amor o por interés?.
- La mía lo hace por amor...
- ¿Como estás tan seguro?
- Porque lo que es interés, no pone ninguno.

Una amiga le pregunta secretamente a la otra:
- María, ¿tú has hecho el amor con condón?
Y la amiga responde: ¿Con don quién?

Una mujer muy ansiosa llega a una farmacia y pregunta:
- ¿Usted vende condones extra largos?
- Si, claro. ¿Cuantos quiere?
- Yo, ninguno....
Pero si no le importa, me gustaría sentarme aquí a esperar a que llegue alguien a pedirlos.

Cual es la diferencia entre el amante y el esposo?
unos 40 minutos.



P: Conoces el castigo para la bigamia?
R: Tener dos suegras.

Un matrimonio llega a la admisión de urgencias del centro de salud de su barrio. El marido con el pene en la mano y su mujer con una gran quemadura en el hombro y la cabeza llena de chichones. Cuando el médico les ve les pregunta:
- ¿Qué les ha pasado que vienen así?
- Ha sido un accidente doméstico.
- ¿Un accidente doméstico y vienen de esta manera? ¿Cómo ha sido?
- Pues verá, esta mañana salí de casa hacia el trabajo, y cuando eran aproximadamente las 12 vi que había olvidado coger unos documentos. Así que volví a recogerlos. Cuando llegué a la cocina encontré a mi mujer desnuda haciendo una tortilla de patatas. La acaricié con tanta ternura que ella se volvió hacia mí y empezó a besarme en el cuello. Fue bajando y besándome hasta introducir mi pene en su boca. Entonces vi que la tortilla de patatas se quemaba, cogí la sartén por el mango elevándola para darle la vuelta en el aire, con tan mala suerte que no acerté al bajarla, y le cayó a mi mujer en la espalda. Ella al quemarse apretó los dientes y me mordió en el pene, y yo para que me soltara cogí el rodillo de cocina y le dí unos cuantos golpes en la cabeza.

Un tío llega con una mujer impresionante a la joyería Tiffany's, y juntos escogen una joya de 50.000 euros para ella.
Al pagar la cuenta, el hombre saca su talonario.
El vendedor pone cara de preocupación, pues es la primera vez en su vida que ve a aquel sujeto.
El cliente que percibe su gesto, le dice:

- Veo que está pensando que el cheque puede no tener fondos, ¿cierto? Pues bien, vamos a hacer lo siguiente:
como hoy es viernes y el banco ya está cerrado.......
quédese con el cheque y con la joya.
El lunes, tan pronto haya cobrado el cheque, mande entregar la joya a la casa de la señorita, ¿OK?

El vendedor se queda tranquilo, hace lo que le propone el cliente y el lunes, al intentar cobrar el cheque...
efectivamente constata que no tiene fondos.
El vendedor telefonea al cliente, quien le responde:

- Puede romper el cheque..., ya me la "cepillé".
Gracias por la colaboración.

muy buenos

Esto es un japonés que llega a una posada, perdida en los montes tibetanos, y le pregunta al posadero si tenia habitación para pasar la noche. El posadero le dice que solo podía ofrecerle un cuarto en el tercer piso, junto al dormitorio de su joven hija. Pero con la condición de que si le pasaba algo a su hija le aplicaría los tres castigos chinos. El japonés le asegura que no va a pasar nada y acepta el cuarto.

A la hora de la cena, el japonés conoce a la hija del posadero. Una dulce chinita de unos 19 años de edad, muy linda y sensual. Parecía una muñequita de porcelana. Durante toda la cena, la joven no dejaba de mirar al japonés que se puso nervioso por la situación tan comprometida que se le presentaba. No podía dejar de pensar en lo que le había dicho el posadero. Pero la tentación fue demasiado grande así que se metió en el dormitorio de la chinita y pasó con ella casi toda la noche.
Cuando ya clareaba el día, cansado, volvió a su cuarto y se durmió profundamente.

Cuando se despierta se encuentra con una roca inmensa encima de su cuerpo, con un papel que decía: “Primer castigo chino: roca encima de cuerpo”. El japonés piensa que si eso era lo peor que podía hacerle el pobre padre, no iba a tener mayores problemas. Se levanta, carga la roca, la tira por la ventana y al tirar la roca por la ventana, ve otro papel en el marco de la ventana que dice: “Segundo castigo chino: roca amarrada a huevo derecho”. El japonés, al ver que la cuerda ya estaba llegando al punto en que mas se estiraría, no se lo piensa dos veces se tira por la ventana mientras piensa mejor un par de huesos rotos que un huevo menos.

Cuando va cayendo por el segundo piso lee un gran cartel en el suelo que dice: “Tercer castigo chino: huevo izquierdo amarrado a pata de cama”.

Un chico japonés ya ha vuelto de ver a la familia.
Antes de que empiecen las clases en la Universidad quiere adecentar el apartamento y conocer algunos sitios turísticos.
El otro día después de sanear el apartamento, cogió toda la ropa sucia, la metió en una bolsa, y se fue a la lavandería de la Universidad,
de mala gana, pues no le pedía el cuerpo echar el día de esa manera.
En fin, una vez en el ascensor se encuentra con la hija de la portera, y se da la circunstancia de que el ascensor se queda parado entre dos pisos.
Se toca el timbre de alarma y pasa el tiempo sin que nadie llegue a rescatarlos.
A la hija de la portera le da un calentón y desesperada, con las bragas en la mano, le dice al nuestro joven:
- ¡¡Hazme mujer!! ¡¡Hazme Mujer!!
Alucinado nuestro japonés, sin pensárselo mucho, le da la bolsa de la ropa sucia y le dice:
- Toma, devuélvemela mañana, lavada y planchada.