Taza de café caliente para el Juez

Las responsabilidades de un secretario joven incluye que el juez tome una taza de café caliente en el inicio de cada día.

Cada mañana, el juez se enfurecía de que la taza de café le llegara solo con dos tercios de su capacidad.

El secretario le explicó que se le caía porque tenía que apresurarse para que a la hora de entregar el café todavía estuviera caliente, lo que le hizo que derramara muchas veces el café a lo largo del camino.

El juez lo llenó de gritos e insultos porque el quería una taza llena de café, hasta que finalmente amenazó con cortar la retribución del secretario en una tercera parte si se seguía produciendo eso .

A la mañana siguiente el juez recibió una taza de café que estaba llena hasta el borde, y a la mañana siguiente y la mañana después de eso.

El juez no pudo resistir la tentación regodeándose con su éxito y con aire de suficiencia felicitó al secretario en su nueva técnica.

"Oh, no hay mucho de eso", admitió el secretario feliz..... "me tomo un poco de café y lo retengo en la boca justo antes de entregarle el café , y lo escupo de vuelta en cuando me acerco a su oficina."