Remedios Naturales para la salud
+8
Mariquita Pe
norai
selena
marisa27
El Avi65
anika
Assor
Nefertari
12 participantes
Página 6 de 15.
Página 6 de 15. • 1 ... 5, 6, 7 ... 10 ... 15
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Hipérico (Aceite):
Indicaciones: Trastornos gástricos, vesiculares, hepáticos, nerviosismo, reuma, neuralgias, herpes zóster, heridas
El hipérico es una planta medicinal que se ha conquistado un merecido puesto entre los remedios caseros. Especialmente el aceite de hipérico, extracto obtenido de sus flores, es de uso muy frecuente. Puede adquirirse en farmacias pero también es factible de ser preparado por uno mismo. Para quienes deseen hacerlo, he aquí la receta de un aceite de primera calidad.
Preparación del aceite de hipérico:
Las flores amarillas del hipérico, cuando acaban de abrirse, allá por San Juan, constituyen la base a recolectar. Se trituran de 25 a 30 gramos de flores frescas y se deshacen en un mortero o almirez. Se añade 1/2 litro de aceite de oliva y se mezcla todo bien. La mezcla se echa en un frasco de boca ancha y, de momento, se deja en un lugar caliente y sin tapar. Se remueve de vez en cuando y al cabo de unos 5 días de fermentación se cierra el frasco y se expone a los rayos del sol hasta que el contenido del frasco toma un color rojo brillante, cosa que, según la intensidad del sol, requerirá de cinco a siete semanas. Al cabo de este tiempo se tira el líquido. Se prensa el precipitado del fondo del frasco y el aceite que se obtiene se deja almacenado nuevamente durante una semana. Durante este tiempo, el aceite se separa del agua procedente de las flores. Con mucho cuidado se echa en un frasquito con capacidad para 100 ó 200 gramos y se guarda en un lugar fresco.
El uso del aceite de hipérico se remonta a Hipócrates, el célebre médico de la antigua Grecia. Otros autores medievales lo recomiendan con las palabras más elogiosas. Como aplicación principal y como remedio casero figuran en el tratamiento de las heridas así como analgésico.
Compresas y fricciones:
Se impregna en aceite un poquito de algodón envuelto en gasa y se aplica sobre la zona afectada (que luego si se desea puede vendarse). De esta forma se activa la curación o se alivia el dolor. Si se trata de dolor de cabeza, deberán friccionarse las sienes con una gota de aceite de hipérico.
Contra el reuma y las neuralgias lo mejor son masajes sobre la zona afectada. En el concreto del herpes zóster se aplican unos toques con aceite de hipérico en los puntos afectados. Si el herpes zóster presenta aún ampollas, las zonas afectadas deberán cubrirse con un trapito impregnado de aceite.
La piel seca puede tratarse durante la noche a base de aceite de hipérico. Se aplica como cualquier otro tipo de aceite (aunque tal vez en menor cantidad).
Uso interno:
En el tratamiento de los trastornos vesiculares y hepáticos, gástricos y del sueño o nerviosismo, deberá tomarse una cucharadita de aceite de hipérico de dos a tres veces al día.
Importante:
Durante el tiempo que dure la cura, el paciente no deberá exponerse directamente ni tomar baños de sol, ya que las materias activas del aceite de hipérico sensibilizan a los efectos de la luz.
Indicaciones: Trastornos gástricos, vesiculares, hepáticos, nerviosismo, reuma, neuralgias, herpes zóster, heridas
El hipérico es una planta medicinal que se ha conquistado un merecido puesto entre los remedios caseros. Especialmente el aceite de hipérico, extracto obtenido de sus flores, es de uso muy frecuente. Puede adquirirse en farmacias pero también es factible de ser preparado por uno mismo. Para quienes deseen hacerlo, he aquí la receta de un aceite de primera calidad.
Preparación del aceite de hipérico:
Las flores amarillas del hipérico, cuando acaban de abrirse, allá por San Juan, constituyen la base a recolectar. Se trituran de 25 a 30 gramos de flores frescas y se deshacen en un mortero o almirez. Se añade 1/2 litro de aceite de oliva y se mezcla todo bien. La mezcla se echa en un frasco de boca ancha y, de momento, se deja en un lugar caliente y sin tapar. Se remueve de vez en cuando y al cabo de unos 5 días de fermentación se cierra el frasco y se expone a los rayos del sol hasta que el contenido del frasco toma un color rojo brillante, cosa que, según la intensidad del sol, requerirá de cinco a siete semanas. Al cabo de este tiempo se tira el líquido. Se prensa el precipitado del fondo del frasco y el aceite que se obtiene se deja almacenado nuevamente durante una semana. Durante este tiempo, el aceite se separa del agua procedente de las flores. Con mucho cuidado se echa en un frasquito con capacidad para 100 ó 200 gramos y se guarda en un lugar fresco.
El uso del aceite de hipérico se remonta a Hipócrates, el célebre médico de la antigua Grecia. Otros autores medievales lo recomiendan con las palabras más elogiosas. Como aplicación principal y como remedio casero figuran en el tratamiento de las heridas así como analgésico.
Compresas y fricciones:
Se impregna en aceite un poquito de algodón envuelto en gasa y se aplica sobre la zona afectada (que luego si se desea puede vendarse). De esta forma se activa la curación o se alivia el dolor. Si se trata de dolor de cabeza, deberán friccionarse las sienes con una gota de aceite de hipérico.
Contra el reuma y las neuralgias lo mejor son masajes sobre la zona afectada. En el concreto del herpes zóster se aplican unos toques con aceite de hipérico en los puntos afectados. Si el herpes zóster presenta aún ampollas, las zonas afectadas deberán cubrirse con un trapito impregnado de aceite.
La piel seca puede tratarse durante la noche a base de aceite de hipérico. Se aplica como cualquier otro tipo de aceite (aunque tal vez en menor cantidad).
Uso interno:
En el tratamiento de los trastornos vesiculares y hepáticos, gástricos y del sueño o nerviosismo, deberá tomarse una cucharadita de aceite de hipérico de dos a tres veces al día.
Importante:
Durante el tiempo que dure la cura, el paciente no deberá exponerse directamente ni tomar baños de sol, ya que las materias activas del aceite de hipérico sensibilizan a los efectos de la luz.
Mariquita Pe- Cocinera Real
- Mensajes : 2489
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Laurel
Indicaciones: Úlceras, eccemas, enfriamientos, lesiones deportivas, dolores articulares, reumatismo, gota.
El laurel (Laurus novilis), oriundo de Asia Menor, crece actualmente por doquier en la región mediterránea, tanto cultivado como silvestre, y lo mismo en la región subtropical de Rusia como en América central y del sur.
El aceite de laurel es una mixtura de grasa y aceite esencial de color verde y aspecto de pomada, obtenida por prensado de los frutos del árbol. Se derrite a la temperatura del cuerpo por lo que resulta fácil friccionarse con él la piel. Puede adquirirse en farmacias bajo la denominación de Lauri oleum = Oleum Lauri expressum.
El aceite de laurel viene usándose desde muy antiguo, especialmente como remedio casero. Sus aplicaciones como linimento son muy variadas. Con el se tratan las ulceraciones y los tumores con el fin de reblandecerlos y provocar la supuración. Sin hacer presión, el masaje o fricción moderados de las partes afectadas hace que la mixtura se derrita y penetre activamente en la piel.
El aceite de laurel es también muy eficaz para friccionar las articulaciones dolorosas y el tratamiento de las enfermedades producidas por enfriamiento. También se usa con éxito para masajes y fricciones en el tratamiento de las impurezas de la piel. Su aplicación activa el riego sanguíneo aparte de que los aceites esenciales actúan como antiséptico y el contenido graso devuelve elasticidad a la piel seca y áspera.
Pese a que el aceite de laurel es muy usado para fricciones, sobre todo en los medios rurales, como remedio casero —y sus efectos son realmente eficaces—, he de advertir que muchas personas son alérgicas a los aceites esenciales que contiene (y a otros tales como el de terpentina, de enebro o de eucalipto). Por consiguiente mi consejo es que antes de proceder a su uso se realice una ligera fricción en un reducido espacio de debajo del brazo para comprobar la reacción.
Importante:
El aceite de laurel obtenido de las hojas irrita notablemente la piel, por lo que en la medicina popular no suele emplearse sin disolver.
El aceite de laurel se emplea también en veterinaria para friccionar las ubres inflamadas de las vacas (suavemente y sin ejercer presión). Muchas de las pomadas que existen en el mercado para tal uso contienen aceite de laurel como componente principal. También se aplica para el tratamiento de las torceduras de los caballos, bien sea en forma de fricciones o aplicándoles un vendaje sobre una gasa untada de la mixtura.
Indicaciones: Úlceras, eccemas, enfriamientos, lesiones deportivas, dolores articulares, reumatismo, gota.
El laurel (Laurus novilis), oriundo de Asia Menor, crece actualmente por doquier en la región mediterránea, tanto cultivado como silvestre, y lo mismo en la región subtropical de Rusia como en América central y del sur.
El aceite de laurel es una mixtura de grasa y aceite esencial de color verde y aspecto de pomada, obtenida por prensado de los frutos del árbol. Se derrite a la temperatura del cuerpo por lo que resulta fácil friccionarse con él la piel. Puede adquirirse en farmacias bajo la denominación de Lauri oleum = Oleum Lauri expressum.
El aceite de laurel viene usándose desde muy antiguo, especialmente como remedio casero. Sus aplicaciones como linimento son muy variadas. Con el se tratan las ulceraciones y los tumores con el fin de reblandecerlos y provocar la supuración. Sin hacer presión, el masaje o fricción moderados de las partes afectadas hace que la mixtura se derrita y penetre activamente en la piel.
El aceite de laurel es también muy eficaz para friccionar las articulaciones dolorosas y el tratamiento de las enfermedades producidas por enfriamiento. También se usa con éxito para masajes y fricciones en el tratamiento de las impurezas de la piel. Su aplicación activa el riego sanguíneo aparte de que los aceites esenciales actúan como antiséptico y el contenido graso devuelve elasticidad a la piel seca y áspera.
Pese a que el aceite de laurel es muy usado para fricciones, sobre todo en los medios rurales, como remedio casero —y sus efectos son realmente eficaces—, he de advertir que muchas personas son alérgicas a los aceites esenciales que contiene (y a otros tales como el de terpentina, de enebro o de eucalipto). Por consiguiente mi consejo es que antes de proceder a su uso se realice una ligera fricción en un reducido espacio de debajo del brazo para comprobar la reacción.
Importante:
El aceite de laurel obtenido de las hojas irrita notablemente la piel, por lo que en la medicina popular no suele emplearse sin disolver.
El aceite de laurel se emplea también en veterinaria para friccionar las ubres inflamadas de las vacas (suavemente y sin ejercer presión). Muchas de las pomadas que existen en el mercado para tal uso contienen aceite de laurel como componente principal. También se aplica para el tratamiento de las torceduras de los caballos, bien sea en forma de fricciones o aplicándoles un vendaje sobre una gasa untada de la mixtura.
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Lino:
Indicaciones: Estreñimiento, trastornos gastrointestinales, inflamaciones de la garganta y de las encías (gingivitis), quemaduras, insolaciones, exantemas, psoriasis, herpes zóster, eccemas, cistitis, hepatitis.
Desde que se comprobó que los purgantes drásticos (incluidos los de origen vegetal) son perjudiciales para el intestino grueso cuando se usan durante un tiempo prolongado, la atención se ha fijado de nuevo en los viejos remedios caseros. Uno de ellos, de probada eficacia, los constituyen las semillas de lino que tomadas regularmente y con cierta dosis de paciencia llegan a curar el estreñimiento crónico. Las semillas de lino se hinchan en el intestino durante la digestión y activan así el movimiento peristáltico intestinal. Además contienen aceite graso de efectos lubricantes que favorecen el efecto laxante y muy pequeñas cantidades de ácido cianhídrico pero que también contribuyen a su eficacia en tal sentido.
Modo de empleo:
Pueden usarse semillas solas o mezcladas con compota o puré de ciruelas. La dosis recomendada es de 2 a 3 cucharadas al levantarse (ésta suele ser la mejor hora) o bien de 2 a 3 cucharadas al día. El problema queda resuelto, por lo general, en pocos días.
Merced a las propiedades específicas de las semillas de lino, tomándolas en infusión se logran paliar los dolores producidos por la gastritis. La infusión de semillas de lino resulta asimismo indicada para el tratamiento de las inflamaciones de garganta (faringitis, laringitis) o de las encías (gingivitis) a base de gargarismos.
Modo de preparar la infusión de semillas de lino:
Se vierte 1/4 de litro de agua fría sobre 2 cucharaditas colmadas de semillas de lino y, removiéndo de vez en cuando, se deja macerar durante unos treinta minutos, colándolo a continuación. Una vez calentado a temperatura agradable para tomar, la infusión estará lista. Los gargarismos deberán repetirse varias veces al día. En el tratamiento de los dolores de estómago, deberán tomarse 2 ó 3 tazas de infusión al día.
La emulsión de semillas de lino:
El aceite obtenido mediante ligero prensado de las semillas de lino (de venta en farmacias) se mezcla a partes iguales con agua caliza y se agita bien. Aplicada contra las quemaduras (con ampollas o sin ellas, pero nunca sobre quemaduras abiertas) proporcionan notable alivio tanto del dolor como de la tensión de la piel, estimulando así la curación. También resulta eficaz en el tratamiento de las quemaduras producidas por el sol.
Los focos residuales de la psoriasis y piel arfiada en pies y manos, pueden tratarse positivamente con fricciones de aceite de lino (de venta en farmacias), activando su curación. Lo mismo cabe decir de los eccemas secos. Especialmente dolorosos es el herpes zóster, incluso una vez que se han curado las ampollas. En tales casos, se asegura en numerosos informes, los toques de aceite de lino proporcionan un gran alivio.
Tratándose de cólicos de la vejiga, dolores abdominales, hepatitis y ulceraciones, resultan especialmente eficaces los saquitos de semillas de lino: Se prepara un saquito de gasa lleno de semillas de lino trituradas (del tamaño idóneo según la aplicación prevista) y se introduce en agua hirviendo, dejándolo que se caliente durante diez minutos. Se saca del recipiente y se deja enfriar, hasta unos 42° C aproximadamente, y se coloca sobre la parte afectada, cubriéndolas luego con un paño de lana durante treinta minutos. El calor penetrante alivia el dolor, especialmente en los casos de inflamación de hígado (hepatitis).
Indicaciones: Estreñimiento, trastornos gastrointestinales, inflamaciones de la garganta y de las encías (gingivitis), quemaduras, insolaciones, exantemas, psoriasis, herpes zóster, eccemas, cistitis, hepatitis.
Desde que se comprobó que los purgantes drásticos (incluidos los de origen vegetal) son perjudiciales para el intestino grueso cuando se usan durante un tiempo prolongado, la atención se ha fijado de nuevo en los viejos remedios caseros. Uno de ellos, de probada eficacia, los constituyen las semillas de lino que tomadas regularmente y con cierta dosis de paciencia llegan a curar el estreñimiento crónico. Las semillas de lino se hinchan en el intestino durante la digestión y activan así el movimiento peristáltico intestinal. Además contienen aceite graso de efectos lubricantes que favorecen el efecto laxante y muy pequeñas cantidades de ácido cianhídrico pero que también contribuyen a su eficacia en tal sentido.
Modo de empleo:
Pueden usarse semillas solas o mezcladas con compota o puré de ciruelas. La dosis recomendada es de 2 a 3 cucharadas al levantarse (ésta suele ser la mejor hora) o bien de 2 a 3 cucharadas al día. El problema queda resuelto, por lo general, en pocos días.
Merced a las propiedades específicas de las semillas de lino, tomándolas en infusión se logran paliar los dolores producidos por la gastritis. La infusión de semillas de lino resulta asimismo indicada para el tratamiento de las inflamaciones de garganta (faringitis, laringitis) o de las encías (gingivitis) a base de gargarismos.
Modo de preparar la infusión de semillas de lino:
Se vierte 1/4 de litro de agua fría sobre 2 cucharaditas colmadas de semillas de lino y, removiéndo de vez en cuando, se deja macerar durante unos treinta minutos, colándolo a continuación. Una vez calentado a temperatura agradable para tomar, la infusión estará lista. Los gargarismos deberán repetirse varias veces al día. En el tratamiento de los dolores de estómago, deberán tomarse 2 ó 3 tazas de infusión al día.
La emulsión de semillas de lino:
El aceite obtenido mediante ligero prensado de las semillas de lino (de venta en farmacias) se mezcla a partes iguales con agua caliza y se agita bien. Aplicada contra las quemaduras (con ampollas o sin ellas, pero nunca sobre quemaduras abiertas) proporcionan notable alivio tanto del dolor como de la tensión de la piel, estimulando así la curación. También resulta eficaz en el tratamiento de las quemaduras producidas por el sol.
Los focos residuales de la psoriasis y piel arfiada en pies y manos, pueden tratarse positivamente con fricciones de aceite de lino (de venta en farmacias), activando su curación. Lo mismo cabe decir de los eccemas secos. Especialmente dolorosos es el herpes zóster, incluso una vez que se han curado las ampollas. En tales casos, se asegura en numerosos informes, los toques de aceite de lino proporcionan un gran alivio.
Tratándose de cólicos de la vejiga, dolores abdominales, hepatitis y ulceraciones, resultan especialmente eficaces los saquitos de semillas de lino: Se prepara un saquito de gasa lleno de semillas de lino trituradas (del tamaño idóneo según la aplicación prevista) y se introduce en agua hirviendo, dejándolo que se caliente durante diez minutos. Se saca del recipiente y se deja enfriar, hasta unos 42° C aproximadamente, y se coloca sobre la parte afectada, cubriéndolas luego con un paño de lana durante treinta minutos. El calor penetrante alivia el dolor, especialmente en los casos de inflamación de hígado (hepatitis).
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Mejorana:
Indicaciones: Constipados y meteorismo de los lactantes y niños pequeños, neuralgias, torceduras, úlceras.
Es posible que esta planta medicinal, que antaño no faltaba en ninguna cocina como especia casi obligada en la preparación de comidas grasas, se haya convertido casualmente en un remedio casero, tal vez por su agradable aroma y la falta de otro recurso más a mano en alguna ocasión determinada. Lo cierto es que como tal, es una planta muy especial.
Con ella se prepara una pomada que aún en nuestros días se viene usando con éxito para combatir los constipados persistentes de los lactantes y el meteorismo que muchas veces padecen.
También resulta eficaz en los adultos contra las neuralgias, dolores reumáticos, torceduras y para el tratamiento de las ulceraciones. El aceite esencial que contiene es su mayor garantía respecto a su eficacia.
Método casero para la preparación de la Pomada de Mejorana:
Se vierte 1 cucharada de alcohol vinílico sobre 3 cucharaditas de mejorana en polvo (de venta en farmacias). Se deja reposar la mezcla durante algunas horas y a continuación se mezcla con 2 cucharadas de mantequilla fresca sin sal y se calienta durante 5 minutos al baño maría. Transcurrido este tiempo, se pasa a través de una gasa y se deja enfriar. Una vez enfriada, la pomada estará lista para el uso.
Con la pomada descrita deberá friccionar suavemente la nariz del bebé, por dentro y por fuera, varias veces al día. Conviene hacerlo antes de acostar al niño con el fin de que durante la noche pueda respirar sin dificultad por la nariz descongestionada. Los lactantes y los niños pequeños que padecen de meteorismo con cierta frecuencia experimentan un gran alivio después de friccionarles suavemente con pomada de mejorana la zona umbilical.
Para ablandar ulceraciones, la pomada de mejorana debe aplicarse sobre una gasa y vendar luego la zona afectada, cambiando el vendaje varias veces al día. La herida no tarda en madurar con el consiguiente alivio del dolor. También en los casos de neuralgia (sobre todo facial), un suave masaje con pomada de mejorana proporciona alivio casi inmediato.
Pero donde la eficacia de la pomada de mejorana resulta posiblemente más patente es en el tratamiento de las distensiones, dislocaciones y torceduras; un suave masaje —sin presionar— y un vendaje posterior es lo más indicado.
Indicaciones: Constipados y meteorismo de los lactantes y niños pequeños, neuralgias, torceduras, úlceras.
Es posible que esta planta medicinal, que antaño no faltaba en ninguna cocina como especia casi obligada en la preparación de comidas grasas, se haya convertido casualmente en un remedio casero, tal vez por su agradable aroma y la falta de otro recurso más a mano en alguna ocasión determinada. Lo cierto es que como tal, es una planta muy especial.
Con ella se prepara una pomada que aún en nuestros días se viene usando con éxito para combatir los constipados persistentes de los lactantes y el meteorismo que muchas veces padecen.
También resulta eficaz en los adultos contra las neuralgias, dolores reumáticos, torceduras y para el tratamiento de las ulceraciones. El aceite esencial que contiene es su mayor garantía respecto a su eficacia.
Método casero para la preparación de la Pomada de Mejorana:
Se vierte 1 cucharada de alcohol vinílico sobre 3 cucharaditas de mejorana en polvo (de venta en farmacias). Se deja reposar la mezcla durante algunas horas y a continuación se mezcla con 2 cucharadas de mantequilla fresca sin sal y se calienta durante 5 minutos al baño maría. Transcurrido este tiempo, se pasa a través de una gasa y se deja enfriar. Una vez enfriada, la pomada estará lista para el uso.
Con la pomada descrita deberá friccionar suavemente la nariz del bebé, por dentro y por fuera, varias veces al día. Conviene hacerlo antes de acostar al niño con el fin de que durante la noche pueda respirar sin dificultad por la nariz descongestionada. Los lactantes y los niños pequeños que padecen de meteorismo con cierta frecuencia experimentan un gran alivio después de friccionarles suavemente con pomada de mejorana la zona umbilical.
Para ablandar ulceraciones, la pomada de mejorana debe aplicarse sobre una gasa y vendar luego la zona afectada, cambiando el vendaje varias veces al día. La herida no tarda en madurar con el consiguiente alivio del dolor. También en los casos de neuralgia (sobre todo facial), un suave masaje con pomada de mejorana proporciona alivio casi inmediato.
Pero donde la eficacia de la pomada de mejorana resulta posiblemente más patente es en el tratamiento de las distensiones, dislocaciones y torceduras; un suave masaje —sin presionar— y un vendaje posterior es lo más indicado.
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Miel:
Indicaciones: Enfriamientos, heridas, trastornos gastrointestinales, inflamaciones bucales y faríngeas, asma, bronquitis, constipados, sinusitis, acné, efélide (pecas).
La miel y sus preparados figuran entre los remedios caseros más populares que conocemos y su eficacia es indudable.
En la actualidad se conocen exactamente todos y cada uno de los componentes de la miel. Además de los azúcares (azúcar de frutas, glucosa, azúcar de caña, maltosa) contiene todos los minerales necesarios para la vida, de los cuales nuestro organismo solamente necesita pequeñísimas cantidades (de ahí su nombre: elementos vestigiales). Estos elementos se hallan contenidos en diversa proporción en las distintas clases de miel aunque todas ellas contienen en cantidad suficiente para nosotros: enzimas, vitaminas, hormonas (acetilcolina), aminoácidos (importantes componentes de las proteínas) y ácidos minerales (ácidos fosfóricos). También hemos de mencionar los «inhibidores», materias que impiden el crecimiento de las bacterias o que las destruyen.
Nuestros antepasados, desconocedores en absoluto del tema de las bacterias, los virus, las vitaminas y los elementos vestigiales e ignorantes de la importancia vital de los aminoácidos, usaban sobradamente la miel para la preparación de medicamentos. Los herbolarios medievales contienen infinidad de instrucciones tales como: «Mézclese con miel», «Prepárese con miel», «Añadasele miel».
A la cabeza de las aplicaciones de la miel figuran las enfermedades producidas por enfriamiento. Para prevenir o atajar un resfriado, una antigua receta casera dice: «Tómese 1 cucharada de miel cinco veces al día». Y justifica tal recomendación añadiendo: «La miel aumenta las defensas del organismo, ayuda a éste a combatir los agentes causantes de la enfermedad y mantiene estable la circulación sanguínea».
La citada receta, en su versión más completa, recomienda adicionalmente, para combatir la tos, tomar la miel disuelta en tila o tomillo. Para los dolores de garganta, se recomienda endulzar con miel el té de salvia (Salvia officinalis), hacer gárgaras con él y luego ingerirlo con el fin de que tanto la miel como la salvia entren en contacto con las zonas de la garganta a las que no pueden llegar mediante los gargarismos.
Limón con miel
Se exprime un limón y se diluye el zumo obtenido con la misma cantidad de agua caliente, se le añaden 2 cucharaditas de miel y se toma a sorbos. Se ha recomendado siempre contra la ronquera y los constipados.
«La nariz se descongestiona masticando miel junto con un trozo de panal». Esta es la recomendación —francamente acertada— que encontré un día en un viejo recetario manuscrito de mi abuela. Respecto a los remedios a base de miel con hinojo, con cebolla o con rábano.
También pueden eliminarse con la administración regular de miel los trastornos gástricos y hepáticos y, muy especialmente, el estreñimiento. A este respecto hemos de señalar en primer lugar la leche con miel por su eficacia: Se mezclan a partes iguales la miel y la leche, hervida y aún caliente, y se toma. Una taza 2 veces al día, durante 2 ó 3 semanas proporciona no solo una mejoría de los trastornos a que nos hemos referido, sino que, al mismo tiempo, la cura fortalece los nervios, estimula la circulación y fortalece el corazón.
Incluso la úlcera de duodeno y la úlcera gástrica pueden ser tratados con éxito a base de una cura de miel: Al levantarse, en ayunas y en el intervalo de 2 horas, se toman 500 gramos de miel y ya al cabo de 4 ó 5 días se advierte (también en las radiografías) una mejoría en el proceso de curación de dichas úlceras. Es obvio, por otra parte, que antes de proceder a realizar la cura que acabamos de recomendar, el paciente deberá consultar con su médico.
Indicaciones: Enfriamientos, heridas, trastornos gastrointestinales, inflamaciones bucales y faríngeas, asma, bronquitis, constipados, sinusitis, acné, efélide (pecas).
La miel y sus preparados figuran entre los remedios caseros más populares que conocemos y su eficacia es indudable.
En la actualidad se conocen exactamente todos y cada uno de los componentes de la miel. Además de los azúcares (azúcar de frutas, glucosa, azúcar de caña, maltosa) contiene todos los minerales necesarios para la vida, de los cuales nuestro organismo solamente necesita pequeñísimas cantidades (de ahí su nombre: elementos vestigiales). Estos elementos se hallan contenidos en diversa proporción en las distintas clases de miel aunque todas ellas contienen en cantidad suficiente para nosotros: enzimas, vitaminas, hormonas (acetilcolina), aminoácidos (importantes componentes de las proteínas) y ácidos minerales (ácidos fosfóricos). También hemos de mencionar los «inhibidores», materias que impiden el crecimiento de las bacterias o que las destruyen.
Nuestros antepasados, desconocedores en absoluto del tema de las bacterias, los virus, las vitaminas y los elementos vestigiales e ignorantes de la importancia vital de los aminoácidos, usaban sobradamente la miel para la preparación de medicamentos. Los herbolarios medievales contienen infinidad de instrucciones tales como: «Mézclese con miel», «Prepárese con miel», «Añadasele miel».
A la cabeza de las aplicaciones de la miel figuran las enfermedades producidas por enfriamiento. Para prevenir o atajar un resfriado, una antigua receta casera dice: «Tómese 1 cucharada de miel cinco veces al día». Y justifica tal recomendación añadiendo: «La miel aumenta las defensas del organismo, ayuda a éste a combatir los agentes causantes de la enfermedad y mantiene estable la circulación sanguínea».
La citada receta, en su versión más completa, recomienda adicionalmente, para combatir la tos, tomar la miel disuelta en tila o tomillo. Para los dolores de garganta, se recomienda endulzar con miel el té de salvia (Salvia officinalis), hacer gárgaras con él y luego ingerirlo con el fin de que tanto la miel como la salvia entren en contacto con las zonas de la garganta a las que no pueden llegar mediante los gargarismos.
Limón con miel
Se exprime un limón y se diluye el zumo obtenido con la misma cantidad de agua caliente, se le añaden 2 cucharaditas de miel y se toma a sorbos. Se ha recomendado siempre contra la ronquera y los constipados.
«La nariz se descongestiona masticando miel junto con un trozo de panal». Esta es la recomendación —francamente acertada— que encontré un día en un viejo recetario manuscrito de mi abuela. Respecto a los remedios a base de miel con hinojo, con cebolla o con rábano.
También pueden eliminarse con la administración regular de miel los trastornos gástricos y hepáticos y, muy especialmente, el estreñimiento. A este respecto hemos de señalar en primer lugar la leche con miel por su eficacia: Se mezclan a partes iguales la miel y la leche, hervida y aún caliente, y se toma. Una taza 2 veces al día, durante 2 ó 3 semanas proporciona no solo una mejoría de los trastornos a que nos hemos referido, sino que, al mismo tiempo, la cura fortalece los nervios, estimula la circulación y fortalece el corazón.
Incluso la úlcera de duodeno y la úlcera gástrica pueden ser tratados con éxito a base de una cura de miel: Al levantarse, en ayunas y en el intervalo de 2 horas, se toman 500 gramos de miel y ya al cabo de 4 ó 5 días se advierte (también en las radiografías) una mejoría en el proceso de curación de dichas úlceras. Es obvio, por otra parte, que antes de proceder a realizar la cura que acabamos de recomendar, el paciente deberá consultar con su médico.
Pe.
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Mirra:
Indicaciones: Inflamaciones bucofaríngeas, inflamaciones de las encías (gingivitis), rozaduras de prótesis.
La mirra es una resina que se obtiene a través de los cortes practicados en la corteza del árbol oriundo de Somalia. Por los cortes fluye un jugo lechoso-amarillento que al entrar en contacto con el aire forma bolas y granos irregulares, se oscurece y despide un intenso aroma. La composición de esta resina de mirra es diversa. Sus componentes más activos son: aceites esenciales y mucílago. En tiempos pasados se tomaba sencillamente un trocito de esta resina —del tamaño aproximado de un garbanzo— y se masticaba con el fin de curar las inflamaciones bucofaríngeas o para protegerse de posibles infecciones.
Los aceites esenciales poseen propiedades antisépticas. En forma concentrada, sin embargo, producen una irritación más o menos intensa de las mucosas. Esta es la razón por la cual el referido modo de empleo cayó en desuso, aunque la mirra siguió y sigue usándose aunque en forma de tintura, más fácil de dosificar y más cómoda de aplicar.
Antaño, esta tintura solía ser preparada en casa, pero desde que fue incluida en las farmacopeas, la tintura de mirra es preferible adquirirla en la farmacia ya que de este modo queda garantizada la calidad. Entre sus usos destacan de manera especial las gárgaras, los toques y los masajes en el tratamiento de las más diversas inflamaciones de las encías, caracterizado por sus convincentes buenos resultados. Incluso en aquellos casos en que otros modernos medicamentos fracasan, la tintura de mirra ha demostrado su eficacia ya sea en el tratamiento de la gingivitis o de la paradentosis (deterioro de las encías por la acción bactericida) o en la curación de inflamaciones o rozaduras producidas por presión de las prótesis o aparatos correctores de la dentadura. Los mejores resultados se obtienen, por lo general, aplicando la tintura con masajes o fricciones: cinco veces seguidas, con 1 gota de tintura en el dedo índice son suficientes. El tratamiento debe realizarse siempre después de las comidas (en casos agudos de 3 a 5 veces al día). Resulta fácil acostumbrarse al sabor astringente de la tintura, máxime cuando la mejoría no tarda en ponerse de manifiesto.
La tintura de mirra puede usarse también preventivamente para enjuagarse la boca. La dosis consiste en 10 a 15 gotas disueltas en 1/2 vaso de agua templada, enjuagándose todas las mañanas y antes de acostarse. En la época en que suelen ser más frecuentes los enfriamientos o ante un posible peligro de infección, los gargarismos con tintura de mirra disuelta en la forma descrita constituyen un excelente profiláctico.
Mezclas con otras tinturas fitoterapéuticas
En muchos botiquines caseros es frecuente encontrar aún hoy en día un frasquito en el que puede leerse: «Gargaras y enjuagues». En la etiqueta se advierte que se trata de una mezcla de tintura de mirra y tintura de ratania o de tormentilla, ambas excelentes complementos activos de la mirra cuyas propiedades desinfectantes y astringentes se ven intensificadas por el alto contenido de tanino que una y otra poseen.
He aquí la receta
Tintura de mirra 20 g
Tintura de tormentila 20 g
o bien
Tintura de mirra 20 g
Tintura de ratania 30 g
Dosis: 20 gotas en 1 vaso de agua templada es la dosis idónea para gargarismos y enjuagues bucales.
Indicaciones: Inflamaciones bucofaríngeas, inflamaciones de las encías (gingivitis), rozaduras de prótesis.
La mirra es una resina que se obtiene a través de los cortes practicados en la corteza del árbol oriundo de Somalia. Por los cortes fluye un jugo lechoso-amarillento que al entrar en contacto con el aire forma bolas y granos irregulares, se oscurece y despide un intenso aroma. La composición de esta resina de mirra es diversa. Sus componentes más activos son: aceites esenciales y mucílago. En tiempos pasados se tomaba sencillamente un trocito de esta resina —del tamaño aproximado de un garbanzo— y se masticaba con el fin de curar las inflamaciones bucofaríngeas o para protegerse de posibles infecciones.
Los aceites esenciales poseen propiedades antisépticas. En forma concentrada, sin embargo, producen una irritación más o menos intensa de las mucosas. Esta es la razón por la cual el referido modo de empleo cayó en desuso, aunque la mirra siguió y sigue usándose aunque en forma de tintura, más fácil de dosificar y más cómoda de aplicar.
Antaño, esta tintura solía ser preparada en casa, pero desde que fue incluida en las farmacopeas, la tintura de mirra es preferible adquirirla en la farmacia ya que de este modo queda garantizada la calidad. Entre sus usos destacan de manera especial las gárgaras, los toques y los masajes en el tratamiento de las más diversas inflamaciones de las encías, caracterizado por sus convincentes buenos resultados. Incluso en aquellos casos en que otros modernos medicamentos fracasan, la tintura de mirra ha demostrado su eficacia ya sea en el tratamiento de la gingivitis o de la paradentosis (deterioro de las encías por la acción bactericida) o en la curación de inflamaciones o rozaduras producidas por presión de las prótesis o aparatos correctores de la dentadura. Los mejores resultados se obtienen, por lo general, aplicando la tintura con masajes o fricciones: cinco veces seguidas, con 1 gota de tintura en el dedo índice son suficientes. El tratamiento debe realizarse siempre después de las comidas (en casos agudos de 3 a 5 veces al día). Resulta fácil acostumbrarse al sabor astringente de la tintura, máxime cuando la mejoría no tarda en ponerse de manifiesto.
La tintura de mirra puede usarse también preventivamente para enjuagarse la boca. La dosis consiste en 10 a 15 gotas disueltas en 1/2 vaso de agua templada, enjuagándose todas las mañanas y antes de acostarse. En la época en que suelen ser más frecuentes los enfriamientos o ante un posible peligro de infección, los gargarismos con tintura de mirra disuelta en la forma descrita constituyen un excelente profiláctico.
Mezclas con otras tinturas fitoterapéuticas
En muchos botiquines caseros es frecuente encontrar aún hoy en día un frasquito en el que puede leerse: «Gargaras y enjuagues». En la etiqueta se advierte que se trata de una mezcla de tintura de mirra y tintura de ratania o de tormentilla, ambas excelentes complementos activos de la mirra cuyas propiedades desinfectantes y astringentes se ven intensificadas por el alto contenido de tanino que una y otra poseen.
He aquí la receta
Tintura de mirra 20 g
Tintura de tormentila 20 g
o bien
Tintura de mirra 20 g
Tintura de ratania 30 g
Dosis: 20 gotas en 1 vaso de agua templada es la dosis idónea para gargarismos y enjuagues bucales.
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Ortiga:
Indicaciones: Reuma, gota, lumbago, ciática, retención de orina, trastornos de la vejiga, fenómenos de la vejez.
Las dos variedades de ortiga, la ortiga mayor y la ortiga blanca, son sobradamente conocidas ya que crecen por doquier en escombreras, caminos matorrales, etc., y prácticamente todo el mundo ha sufrido alguna vez el escozor producido por sus hojas.
En la medicina popular, la ortiga siempre ha ocupado un lugar prominente y la medicina moderna reconoce las propiedades antirreumáticas del té y su eficacia contra la gota y como diurético. Quiero resaltar, sin embargo, un remedio casero muy particular a este respecto. Me refiero a la vara de ortigas contra la ciática y el lumbago. Pese a que aquellas personas que no han probado sus efectos suelen considerar su uso como una auténtica «tortura», los pacientes que han recurrido a ella no dejan de elogiar su eficacia.
Modo de efectuar el tratamiento
Se cortan suficientes ortigas en flor, se atan formando un ramillete o vara y se azota uno con ella tres días seguidos sobre la parte afectada. Se descansa durante varios días para evitar la hipersensibilización al jugo urticante. Este producto urticante es lo que penetra en la piel y produce, al cabo de un breve picor, una agradable sensación de calor que persiste durante varias horas. Terminado el tratamiento descrito, deberá evitarse el agua fría ya que su aplicación reconvierte el calor en picor. Como puede verse, el tratamiento con vara de ortigas no es otra cosa que una terapia estimulante.
Otro remedio casero en base a la ortiga es el vino preparado con sus semillas, usado desde muy antiguo en la medicina popular como producto contra el envejecimiento prematuro. Actualmente se ha podido comprobar científicamente su eficacia y establecer sus causas que no son sino las propiedades contenidas en las semillas en virtud de su aceite esencial rico en tocoferol (vitamina E). También se han advertido otros componentes de efectos semihormonales no bien diferenciados. El vino de ortigas es, por consiguiente, un auténtico geriátrico.
Receta de vino de semillas de ortiga
Las semillas pueden recolectarse a finales del otoño deslizando el puño enguantado alrededor de la planta. Una vez trituradas en el mortero, se introducen unos 50 g de semilla en una botella de 1 litro y se le añaden 1/4 de litro de vino blanco. Se deja macerar durante unos veinte días (agitándolo fuertemente de vez en cuando) y luego se cuela.
A continuación se le agregan 100 gramos de miel se tapa la botella y se guarda en el frigorífico, donde puede mantenerse durante un mes. La dosis diaria recomendada es de 1 copita de las de licor de una a tres veces al día.
Merece mencionarse asimismo que los hombres de cierta edad que a consecuencia de un agrandamiento benigno de próstata padecen trastornos de micción, experimentan un notable alivio con el té de ortigas, merced a sus efectos tonificantes y diuréticos.
Modo de preparar el té de ortigas
Se vierte 1/4 de litro de agua hirviendo sobre 2 cucharaditas colmadas de hojas de ortiga, se deja reposar durante diez minutos y se cuela. La dosis recomendada es de 1 taza de té tres veces al día.
-
Indicaciones: Reuma, gota, lumbago, ciática, retención de orina, trastornos de la vejiga, fenómenos de la vejez.
Las dos variedades de ortiga, la ortiga mayor y la ortiga blanca, son sobradamente conocidas ya que crecen por doquier en escombreras, caminos matorrales, etc., y prácticamente todo el mundo ha sufrido alguna vez el escozor producido por sus hojas.
En la medicina popular, la ortiga siempre ha ocupado un lugar prominente y la medicina moderna reconoce las propiedades antirreumáticas del té y su eficacia contra la gota y como diurético. Quiero resaltar, sin embargo, un remedio casero muy particular a este respecto. Me refiero a la vara de ortigas contra la ciática y el lumbago. Pese a que aquellas personas que no han probado sus efectos suelen considerar su uso como una auténtica «tortura», los pacientes que han recurrido a ella no dejan de elogiar su eficacia.
Modo de efectuar el tratamiento
Se cortan suficientes ortigas en flor, se atan formando un ramillete o vara y se azota uno con ella tres días seguidos sobre la parte afectada. Se descansa durante varios días para evitar la hipersensibilización al jugo urticante. Este producto urticante es lo que penetra en la piel y produce, al cabo de un breve picor, una agradable sensación de calor que persiste durante varias horas. Terminado el tratamiento descrito, deberá evitarse el agua fría ya que su aplicación reconvierte el calor en picor. Como puede verse, el tratamiento con vara de ortigas no es otra cosa que una terapia estimulante.
Otro remedio casero en base a la ortiga es el vino preparado con sus semillas, usado desde muy antiguo en la medicina popular como producto contra el envejecimiento prematuro. Actualmente se ha podido comprobar científicamente su eficacia y establecer sus causas que no son sino las propiedades contenidas en las semillas en virtud de su aceite esencial rico en tocoferol (vitamina E). También se han advertido otros componentes de efectos semihormonales no bien diferenciados. El vino de ortigas es, por consiguiente, un auténtico geriátrico.
Receta de vino de semillas de ortiga
Las semillas pueden recolectarse a finales del otoño deslizando el puño enguantado alrededor de la planta. Una vez trituradas en el mortero, se introducen unos 50 g de semilla en una botella de 1 litro y se le añaden 1/4 de litro de vino blanco. Se deja macerar durante unos veinte días (agitándolo fuertemente de vez en cuando) y luego se cuela.
A continuación se le agregan 100 gramos de miel se tapa la botella y se guarda en el frigorífico, donde puede mantenerse durante un mes. La dosis diaria recomendada es de 1 copita de las de licor de una a tres veces al día.
Merece mencionarse asimismo que los hombres de cierta edad que a consecuencia de un agrandamiento benigno de próstata padecen trastornos de micción, experimentan un notable alivio con el té de ortigas, merced a sus efectos tonificantes y diuréticos.
Modo de preparar el té de ortigas
Se vierte 1/4 de litro de agua hirviendo sobre 2 cucharaditas colmadas de hojas de ortiga, se deja reposar durante diez minutos y se cuela. La dosis recomendada es de 1 taza de té tres veces al día.
-
Pe
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
Gracias Amiga por aprendernos tantas cosas, viva la medicina naturalista
diputacion-
Mensajes : 79985
Localización : buscando un sueño
Inscrito : 01/02/2009
Re: Remedios Naturales para la salud
Gracias a ti por pasar por aquí . Bs de Pe
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Re: Remedios Naturales para la salud
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Rábano:
Indicaciones: Trastornos gastrointestinales, de la vesícula biliar, enfriamientos, tos, asma, enfermedades cutáneas por hongos, paradentosis, dolores de cabeza, reuma, dolores de muelas.
Rábano y Rábano Rusticano
El campo de aplicación de ambas plantas medicinales se complementa en muchos aspectos. El rábano (Raphanus sativus) es una planta de cultivo conocida en la antigüedad. Ya en la construcción de las pirámides, en el antiguo Egipto, se administraba a los trabajadores rábano y ajo con el fin de mantenerlos sanos. Existen varias razas de rábano, distintas entre sí por su forma y color. La especie negra es más fuerte y más eficaz desde el punto de vista medicinal que la variedad más larga y blanca.
El rábano rusticano (Amoracia rusticana), es oriundo del sur de Europa pero se cultiva casi en todas partes del mundo.
Como remedio casero figura en primer lugar el jugo de rábano, usado contra las afecciones hepáticas y de la vesícula biliar. Una cura de jugo de rábano, prolongada durante quince días, es especialmente aconsejable para combatir los trastornos digestivos (incluso si van acompañados de meteorismo y estreñimiento) cuyo origen sea la insuficiencia de bilis. También las inflamaciones de la vesícula biliar responden favorablemente ante esta cura.
Dosis
1 vaso con unos 50 a 100 g de jugo de rábano delante de las comidas.
Modo de preparar uno mismo el jugo de rábano
El rábano cortado se introduce en una licuadora y se recoge el jugo en un recipiente graduado hasta obtener la cantidad necesaria.
Preparación y uso del arándano rusticano
Ambos se diferencian pese a que su finalidad puede ser la misma. Se raya el rábano hasta obtener aproximadamente 1/2 cucharadita de la planta y luego se mezcla, removiéndolo bien, en un vaso de leche tibia. El preparado deberá tomarse seguidamente.
Tanto el rábano como el rábano rusticano, son remedios caseros muy populares y acreditados contra la tos, el asma y los enfriamientos acompañados de fiebre. Sus formas de uso son diferentes, pero considero que a efectos prácticos son suficientes las cuatro recetas siguientes para la preparación de miel con rábano y con rábano rusticano respectivamente:
Indicaciones: Trastornos gastrointestinales, de la vesícula biliar, enfriamientos, tos, asma, enfermedades cutáneas por hongos, paradentosis, dolores de cabeza, reuma, dolores de muelas.
Rábano y Rábano Rusticano
El campo de aplicación de ambas plantas medicinales se complementa en muchos aspectos. El rábano (Raphanus sativus) es una planta de cultivo conocida en la antigüedad. Ya en la construcción de las pirámides, en el antiguo Egipto, se administraba a los trabajadores rábano y ajo con el fin de mantenerlos sanos. Existen varias razas de rábano, distintas entre sí por su forma y color. La especie negra es más fuerte y más eficaz desde el punto de vista medicinal que la variedad más larga y blanca.
El rábano rusticano (Amoracia rusticana), es oriundo del sur de Europa pero se cultiva casi en todas partes del mundo.
Como remedio casero figura en primer lugar el jugo de rábano, usado contra las afecciones hepáticas y de la vesícula biliar. Una cura de jugo de rábano, prolongada durante quince días, es especialmente aconsejable para combatir los trastornos digestivos (incluso si van acompañados de meteorismo y estreñimiento) cuyo origen sea la insuficiencia de bilis. También las inflamaciones de la vesícula biliar responden favorablemente ante esta cura.
Dosis
1 vaso con unos 50 a 100 g de jugo de rábano delante de las comidas.
Modo de preparar uno mismo el jugo de rábano
El rábano cortado se introduce en una licuadora y se recoge el jugo en un recipiente graduado hasta obtener la cantidad necesaria.
Preparación y uso del arándano rusticano
Ambos se diferencian pese a que su finalidad puede ser la misma. Se raya el rábano hasta obtener aproximadamente 1/2 cucharadita de la planta y luego se mezcla, removiéndolo bien, en un vaso de leche tibia. El preparado deberá tomarse seguidamente.
Tanto el rábano como el rábano rusticano, son remedios caseros muy populares y acreditados contra la tos, el asma y los enfriamientos acompañados de fiebre. Sus formas de uso son diferentes, pero considero que a efectos prácticos son suficientes las cuatro recetas siguientes para la preparación de miel con rábano y con rábano rusticano respectivamente:
Pe
Mariquita Pe- Cocinera Real
-
Mensajes : 2489
Localización : badalona
Inscrito : 03/04/2013
Página 6 de 15. • 1 ... 5, 6, 7 ... 10 ... 15
Temas similares
» Remedios Naturales para Vencer el Cansancio
» Remedios para la ansiedad
» historias naturales: comer para vivir
» Remedios Cervantes hace perder 5.000€
» Ayudas Naturales para Calmar la Úlcera de Estómago
» Remedios para la ansiedad
» historias naturales: comer para vivir
» Remedios Cervantes hace perder 5.000€
» Ayudas Naturales para Calmar la Úlcera de Estómago
Página 6 de 15.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.